Hablando de chinos…

¡¡¡¡FELIZ AÑO NUEVO CHINO DE LA CABRA!!!!!

Los celíacos tenemos un gran problema cada vez que salimos a comer por ahí, pero a mi juicio, el problema se convierte en problemón cuando hablamos de comida china en un restaurante.

Hay gente que tiende a ir apelando a la confianza de pedir cosas que sus ingredientes son en esencia sin gluten. En ese grupillo me incluía yo hasta hace un año y algo, me pedía un arroz y me concienciaba de que no me iba a pasar nada. Ya llegó un momento en el que me pudo la aprensión y decidí dejar los chinos para siempre jamás.

Si queréis os cuento las razones para ver si estáis de acuerdo conmigo y me decís lo que os parece.

  1. Y creo que la más importante es el IDIOMA: No sabemos hasta qué punto se es conocedor en su país de origen la enfermedad celíaca. Esto nos lleva a preguntarnos si vamos a ser capaces de explicar a un chino lo que es nuestra enfermedad y lo que implica si comemos algo que no debemos y por otro lado, explicarles cómo nos debería de preparar la comida para que estemos tranquilos, lo que significa el rollo de contarles que tienen que limpiar la sartén antes de hacernos el arroz, que no pueden usar utensilios de madera con lo que vayan a cocinar para nosotros, que ni pensar en pedir algo en lo que vayan a usar horno, que todo tiene que ser a la plancha, que no puede haber frito ningún rollito ni ningún pan en la misma sartén en la que vaya a hacer el arroz a menos que me certifique que la sartén está como una patena, que no me puede mezclar aceites, que no puede poner salsa de soja en lo que vaya a hacer para mí, ni jamón de york ni puede correr ningún riesgo a ningún nivel. Tras todos estos datos el camarero tiene tres opciones, la rara que va a ser el responsabilizarse, el marearse que va a ser la normal y el echarte, que va a ser la opción más antipática, pero también viable.
  2. Que a pesar de que nos queramos integrar este es un proceso que todavía es largo y arduo y tiene que ser un muy poquito a poco y más cuando se pretende hacerlo con tranquilidad y relativo buen humor como lo intenta un celíaco día a día. Por favor, si ya es importante ir a restaurantes que tengan algún tipo de certificación, en estos casos más. Ya que con alguien que habla tu idioma (volvemos al idioma) y con una cultura parecida a la tuya  todavía puedes negociar, pero en estos casos, creo que es imposible.
  3. Porque se nos tiene que meter en la cabeza que los que nos tenemos que cuidar somos nosotros y somos los primeros que tenemos que velar por nuestra salud. Luego viene el ponerse malo y culpabilizar a ese camarero que no te supo informar bien y te contaminaste, por favor, id a sitios seguros y aún siéndolo poneros pesados, que no pasa nada. Eso sí, siempre pensando en que el que tenéis al otro lado está trabajando y es una persona que se puede equivocar, desde la educación se consigue mucho más que desde la antipatía que nos produce tener algo que nos limita de esta manera.

*Por si no queda claro, hablo de restaurantes chinos pero puedo hablar de cualquiera en los que no hay certificación ni posibilidad ninguna de comunicación con la gente que lleva el restaurante. ¡Ojalá esto vaya mejorando y dentro de relativo poco tiempo tengamos sitios para poder acudir sin necesidad de hacernos estas preguntas!, pero de momento, se nos va la salud en ello, así que… ¡Mucho cuidado!

Aquí os dejo mi aportación al año nuevo chino. 🙂

Foto0111

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2 comentarios en “Hablando de chinos…

  1. No sabes tú de la gente que va a restaurantes de comida asiática y otros que son altamente difícil de demostrar que lo hagan bien. También hay algunos que sí eh?

    En fin, cada uno tiene que ser responsable, pero más de una contaminación debe haber.

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